La Romería a la ermita de San Miguel se ha convertido ya en una tradicional marcha con la que iniciar con buen pie el otoño en Calasparra. Una ocasión para subir a la sierra de San Miguel, de 585 metros de altura, que ofrece unas estupendas vistas de Calasparra y los alrededores. A la llegada, un almuerzo y la obligada oración frente a la imagen del santo que alberga la ermita, completan la tradicional subida a una de las sierras más querida y transitada por los calasparreños.
Una romería en la que cada año hay mayor participación y a cuyo éxito contribuye el buen tiempo que suele reinar en esta fechas del “veranillo del membrillo”. La subida entre pinos y romeros se ha convertido en la primera cita obligada del turismo activo del otoño en la Comarca del Noroeste.
El alcalde de Calasparra, Jesús Navarro, y las concejalas de Turismo y Cultura, Mª Dolores Gomariz y Cristina Trujillo, respectivamente, se unieron a los romeros.
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