CAM edita un estudio de la Universidad de Alicante sobre la influencia económica y social del Tajo-Segura. El informe señala que más de 110.000 empleos directos dependen del agua del trasvase.
Caja Mediterráneo (CAM) edita un estudio que pone de manifiesto que el trasvase Tajo-Segura es una infraestructura esencial no sólo para el desarrollo de las provincias de Alicante y Murcia, sino también para las comunidades de Castilla-La Mancha, Madrid y Extremadura.La entidad bancaria presentará así la próxima semana este libro, titulado ´El Trasvase Tajo-Segura: repercusiones económicas, sociales y ambientales en la cuenca del Segura´, realizado por el Instituto Universitario del Agua y Ciencias Ambientales de la Universidad de Alicante, bajo la dirección de Joaquín Melgarejo Moreno, profesor del departamento de Análisis Económico Aplicado. En concreto, las conclusiones del informe, que ha estado coordinado por el director del Instituto Euromediterráneo del Agua, Francisco Cabezas, se darán a conocer al público el miércoles 16 de diciembre en un acto que dará comienzo a las 19.30 horas en el Aula CAM de Murcia y que estará moderado por el presidente territorial de Caja Mediterráneo, Ángel Martínez.El estudio concluye, en base a una amplia documentación, que el Acueducto del Tajo Segura es vital no sólo para el desarrollo económico y social de las provincias de Murcia, Alicante y Almería, sino también para abastecer de agua potable a la población. El estudio evidencia que el 60 por ciento del suministro del agua que distribuye la Mancomunidad de los Canales del Taibilla en los municipios de las provincias de Murcia y Alicante depende del trasvase, convirtiendo a este acueducto en indispensable para el abastecimiento humano.Por otra parte, el informe señala que la desalación no puede compensar "en modo alguno" la desaparición de los recursos hídricos aportados por el Trasvase. Según el mismo, a pesar de que hace seis años que se dispone de agua desalada, esta aportación tan sólo ha servido para compensar la disminución de recurso del río Taibilla y del Sinclinal de Calasparra. Otra conclusión es que la desalación no permite que la distribución del agua sea homogénea, ya que se limita a las zonas costeras.Además de ser un garante para el abastecimiento de la población, el agua trasvasada desde el Tajo es fundamental para el mantenimiento de sectores estratégicos del sureste español como la agricultura y el turismo, generando más de 110.000 empleos directos. Así, el estudio de la Universidad de Alicante recoge que el 32,48 por ciento de la producción agrícola de Almería, Alicante y Murcia, valorada en más de 1.040 millones de euros, depende del agua trasvasada desde el Tajo. Un agua que genera un favorable impacto ambiental, ya que sirve para mantener caudales en la cuenca del Segura y evitar la desertización en más de 120.000 hectáreas de regadío de esta cuenca dependientes de este trasvase.
Caja Mediterráneo (CAM) edita un estudio que pone de manifiesto que el trasvase Tajo-Segura es una infraestructura esencial no sólo para el desarrollo de las provincias de Alicante y Murcia, sino también para las comunidades de Castilla-La Mancha, Madrid y Extremadura.La entidad bancaria presentará así la próxima semana este libro, titulado ´El Trasvase Tajo-Segura: repercusiones económicas, sociales y ambientales en la cuenca del Segura´, realizado por el Instituto Universitario del Agua y Ciencias Ambientales de la Universidad de Alicante, bajo la dirección de Joaquín Melgarejo Moreno, profesor del departamento de Análisis Económico Aplicado. En concreto, las conclusiones del informe, que ha estado coordinado por el director del Instituto Euromediterráneo del Agua, Francisco Cabezas, se darán a conocer al público el miércoles 16 de diciembre en un acto que dará comienzo a las 19.30 horas en el Aula CAM de Murcia y que estará moderado por el presidente territorial de Caja Mediterráneo, Ángel Martínez.El estudio concluye, en base a una amplia documentación, que el Acueducto del Tajo Segura es vital no sólo para el desarrollo económico y social de las provincias de Murcia, Alicante y Almería, sino también para abastecer de agua potable a la población. El estudio evidencia que el 60 por ciento del suministro del agua que distribuye la Mancomunidad de los Canales del Taibilla en los municipios de las provincias de Murcia y Alicante depende del trasvase, convirtiendo a este acueducto en indispensable para el abastecimiento humano.Por otra parte, el informe señala que la desalación no puede compensar "en modo alguno" la desaparición de los recursos hídricos aportados por el Trasvase. Según el mismo, a pesar de que hace seis años que se dispone de agua desalada, esta aportación tan sólo ha servido para compensar la disminución de recurso del río Taibilla y del Sinclinal de Calasparra. Otra conclusión es que la desalación no permite que la distribución del agua sea homogénea, ya que se limita a las zonas costeras.Además de ser un garante para el abastecimiento de la población, el agua trasvasada desde el Tajo es fundamental para el mantenimiento de sectores estratégicos del sureste español como la agricultura y el turismo, generando más de 110.000 empleos directos. Así, el estudio de la Universidad de Alicante recoge que el 32,48 por ciento de la producción agrícola de Almería, Alicante y Murcia, valorada en más de 1.040 millones de euros, depende del agua trasvasada desde el Tajo. Un agua que genera un favorable impacto ambiental, ya que sirve para mantener caudales en la cuenca del Segura y evitar la desertización en más de 120.000 hectáreas de regadío de esta cuenca dependientes de este trasvase.
Fuente: www.lacronica.net
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