El Seprona recorre la sierra del Molino en busca del rastro de los pirómanos

El Seprona de la Guardia Civil está recorriendo la sierra del Molino, en Calasparra, para intentar encontrar indicios de los presuntos pirómanos, según anunció ayer el delegado del Gobierno, Rafael González Tovar. Todo parece que el fuego fue intencionado y los agentes han iniciado su trabajo para hallar huellas o cualquier otra prueba que puedan dar con los supuestos autores. La zona es poco transitada, así que es complicado que se encuentren testigos que puedan aportar datos de interés.El incendio forestal, que ha quemado más de 900 hectáreas, está estabilizado y los bomberos esperan que, de continuar la climatología como hasta ahora, pueda quedar completamente controlado en el día de hoy.El incendio, el más significativo en la Región desde el de Moratalla, en 1994, que asoló casi 30.000 hectáreas, se inició en la tarde del pasado martes en la Sierra del Molino con dos focos distantes en seis kilómetros.De las más de 900 hectáreas quemadas, compuestas por matorral y pinar de las sierras del Molino, Losares, La Albalda y La Palera, situadas entre Calasparra y Cieza, alrededor de 800 son de gran valor ecológico y algunas de ellas se encuentran protegidas como Lugar de Importancia Comunitaria (LIC) y Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA).Según fuentes del Gobierno regional, en la zona se encuentran trabajando 175 efectivos, entre bomberos, miembros de Protección Civil y militares, apoyados por dos helicópteros, uno con base en La Alberquilla y el otro en Alcantarilla, que permanecerán realizando tareas de refresco y vigilancia «hasta que sea preciso».El alcalde de Calasparra, Jesús Navarro, afirmó que «los técnicos andan con cautela, porque aparecen ocasionalmente pequeños focos que humo, que inmediatamente son sofocados por medios aéreos y terrestres, por eso no debemos de bajar la guardia». Navarro también comunicaba que las tareas duraran varios días y que, según los primeros cálculos, el número de hectáreas afectado podría ser inferior a lo inicialmente comunicado.Pese a que las perspectivas son buenas, el consejero de Justicia y Seguridad Ciudadana, Manuel Campos, señala que «no hay que bajar la guardia porque todavía hay puntos calientes y el viento puede jugar una mala pasada».Fuentes del Gobierno regional señalaron que el ministerio de Medio Ambiente ha elaborado un informe en el que destaca que, dada la prontitud de las actuaciones emprendidas, se ha evitado que las llamas arrasasen hasta 2.500 hectáreas de terreno.Continúa el riesgo elevadoPor otra parte, el índice de riesgo de incendios continua siendo elevado en el centro de la Región de Murcia y en puntos de la Comunidad Valenciana, así en la zona sur de Asturias, el norte de Burgos, Álava, La Rioja, Tarragona, extremo occidental de Mallorca, Valle del Ebro y oeste de Andalucía.

Fuente: www.laopiniondemurcia.es